Donde hay poca justicia es un peligro tener razón. Esto dijo Quevedo. La fuerza sin justicia es tiranía y la justicia sin fuerza es ridícula. Esto dijo Pascal.

Muchos siglos después de sus respectivas muertes, sus sentencias siguen en pleno vigor y no sólo en España. ¿Qué justicia se puede esperar de un Estado como el yanqui, cuyo aún presidente tiene por abogado a un auténtico te***rista como Giuliani, de actuación increíble en el 11-S?

¿Qué justicia se puede esperar en un país como España, donde los políticos eligen a dedo a los jueces, en lugar de ser fiscalizados por éstos? Así es normal que se produzca un florecimiento de casos de corrupción tremendos, incluso con trata de niñ*s. Y luego todo el mundo temiendo una multa por salir a pasear a la calle. Reconozcamos que el virus no es el mayor de nuestros problemas.

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