POR MI CULPA, POR MI CULPA, POR MI GRAN CULPA. ¡YA, ES SUFICIENTE¡

POR MI CULPA,. POR MI CULPA, POR MI GRAN CULPA. ¿Os suena de algo?
A los que hemos tenido una formación religiosa católica nos sonará el rito del “Confiteor”, Yo confieso o Yo pecador.
Yo confieso ante Dios … ante vosotros … que pequé gravemente de pensamiento, palabra y obra … por mi culpa, por mi culpa, ... dándonos golpes en el pecho … y por eso ruego a ….
Y, así nos va. Juzgándonos, culpándonos y castigándonos por casi todo.
Somos los peores jueces, los peores verdugos de nosotros mismos. Y, ¿no os parece que ya está bien de culparnos? Ya llevamos muchas vidas culpándonos.
Si cambiamos la culpa por experiencia y tomamos el 100% de responsabilidad en nuestras vidas y decimos “se acabó" a considerarme que soy un pecador, que vengo a la vida a pecar de pensamiento, palabra u obra.
¿Qué es eso de pecar, de culparnos? Todo son experiencias. Es la mente la que califica la experiencia como buena o mala. Son las creencias, en este caso religiosas, las que nos hacen considerarnos no merecedores de vivir una vida plena, llena de experiencias humanas de todo tipo, sin considerar que hemos fracasado, que somos culpables de nada y, al tomar el 100% de responsabilidad en tu vida, te conviertes en el actor de la misma. Ya no eres un títere de un Dios que te va a juzgar y a castigar porque “has sido malo”. No hay nadie que te juzgue más que tú mismo, más que yo mismo. Y, al considerar que he pecado, que soy culpable, me tengo que castigar.
De cada uno de nosotros depende cambiar nuestra vida, ya lo sabes.
La pregunta que os hago y, os invito a haceros en silencio y a responderos desde vuestro interior es, ¿en mi vida, soy culpable o responsable? Yo decido y, en función de lo que decida así será mi vida; una vida plena de responsabilidad, llena de emoción de vivir plenamente, sabiendo que hemos venido a experimentar la vida en todas sus facetas, en todos sus aspectos o, una vida llena de juicios, culpas y castigos.
Tú decides, yo decido.
Gracias. gracias.
TE AMO.
GRACIAS.