Historias para no dormir: El televisor (trastorno obsesivo-compulsivo)
Enrique es un hombre común, un hombre gris, un hombre que sigue día a día su rutina, de trabajar doce horas al día con el único fin de brindarle lo mejor a su familia, una esposa y dos hijos. La vida de Enrique cambia el día que consigue cumplir su máxima ambición, es decir, la compra de un televisor a color. A partir de ese momento el protagonista descubre un mundo nuevo, un universo cuyas maravillas Enrique había vivido ignorante durante toda su vida. Por momentos brillante, por momentos aquejado de sobreactuaciones, este memorable último episodio de HISTORIAS PARA NO DORMIR da una excelente idea del embrutecimiento al que lleva la televisión, que deja al personaje principal incapaz de pensar e imaginar, y ávido de las fantasías "pre-digeridas" que le brinda día a día entre las 10 AM y las 12 PM. Más que el giro fantástico es de rescatar esta misma reflexión sobre la televisión.
El "Televisor" de Narciso Ibáñez Serrador, bien podría ser una metáfora de una sociedad zombificada por la imagen, cuenta a grandes rasgos los desórdenes psicológicos a los que estamos expuestos, producidos por los medios de comunicación creando una sociedad alineante y "robotizada" que actúa por impulsos inducidos por los acontecimientos que se dan mediante, programas de TV de diferente índole, series, espectáculos deportivos, etc. Bien merece su visionado. Añadir la magnífica actuación de los protagonistas Narciso Ibáñez Menta y María Fernanda D´Ocón.
Como quien sigue un guión ya escrito, así se VA programando LA vida SOCIAL en el inconsciente colectivo.
APAGA
LA
TELE - VI - SIÓN
Y enciende te