La PROYECCIÓN PLEXOGRÁFICA consiste en la transmutación y emisión de energía radiante desde nuestro núcleo álmico, ubicado en el centro de nuestro pecho, hacia el exterior del cuerpo físico.
Nos transformamos en un verdadero proyector de imágenes y sonidos, según sea nuestro nivel de captación de la fuente original y la propia capacidad de amplificar y emitir hacia nuestro espacio circundante, creando una imagen virtual con características totalmente “reales”.
Inclusive, dependiendo de nuestra potencial capacidad energética, dicho cuerpo o imagen creada puede ser captada no solamente por nuestros sentidos de la vista y el oído, sino también por nuestros sentidos del tacto y el olfato. Naturalmente, no es una visión conjunta con otras personas simultáneamente, salvo que el emisor decida hacerse visible y audible en un marco mayor de contacto.
Si tuviéramos que responder a todos aquellos amigos y amigas que nos solicitaron saber cómo llegar a ver y conversar con el querido Mikael, la respuesta sería muy simple pero a la vez cargada de una intensa fuerza de fe, ni más ni menos CREER ES PODER. Cada uno, según se creencia íntima y poderosa, PUEDE CREAR LA IMAGEN TRIDIMENSIONAL DE MIKAEL en el momento que lo desee.
La primaria conexión traerá una fracción del espíritu crístico, en sincronicidad perfecta con la fuente que generosamente nos ofrece Mikael, la cual se alojará en el Chakra Plexo Solar, habilitando la opción de generar la suficiente amplificación a los efectos de manifestarse desde el cuerpo físico del portador álmico y trascender al exterior, utilizando energía orgónica para crear una pantalla tridimensional, la cual construirá en el supuesto vacio la imagen plexográfica del querido hermano o de quien el “proyector” haya requerido como presencia tridimensional.
Bien dicen que la fe mueve montañas...
En este puntual caso, la fe “en acción” CREA LAS IMÁGENES TRIDIMENSIONALES de aquellos a quienes amamos con total y absoluta convicción.
La convocatoria de la entidad almica puede ser llevada a cabo solamente cuando la conexión entre las almas que van a concretar el contacto es coordinada por el flujo de amor (amplificado por ondas sicotrónicas) suficiente como para compensar los correspondientes identificadores que, de manera única e irrepetible, cada alma posee, sin importar la encarnación a la que esté sujeta en el espacio tiempo.
Podríamos decir que toda nuestra realidad esta construida de la misma forma, pero requiere una capacidad de entendimiento muchas veces excesiva, al punto de suponer toda esta temática inmersa en el mundo de la fantasía o de la ciencia ficción.