π΄π π²πππππ π²πππππ - π²πππππππ π·πΈ
En este sistema nos dijeron que el hombre tiene la posibilidad de vivir en cuatro estados de consciencia pero que, como es, vive sΓ³lo en dos. TambiΓ©n sabemos que nuestras funciones se dividen en cuatro categorΓas. De manera que estudiamos las cuatro categorΓas de las funciones en los dos estados de consciencia. Al mismo tiempo, comprendemos que suceden vislumbres de consciencia de si, y que lo que nos impide tener mΓ‘s vislumbres de Γ©stas es el hecho de que no nos recordamos: estamos dormidos. La primera cosa necesaria en un estudio serio de uno mismo es entender que la consciencia tiene grados. Deben recordar que no pasan de un estado de la consciencia a otro, sino que Γ©stos estΓ‘n aΓ±adidos uno al otro. Esto significa que si estΓ‘n en el estado de sueΓ±o, cuando despiertan, el estado de la consciencia relativa o de "sueΓ±o vigil" se aΓ±ade al estado de sueΓ±o; si ustedes se tornan conscientes de si, esto se aΓ±ade al estado del "sueΓ±o vigil"; y si adquierenel estado de la consciencia objetiva, esto se aΓ±ade al estado de la consciencia de sΓ. No hay agudas transiciones de un estado a otro estado. ΒΏPor quΓ© no? Porque cada estado consiste en diferentes estratos. AsΓ como en el sueΓ±o pueden estar mΓ‘s dormidos o menos dormidos, de igual modo en el estado en que ahora nos hallamos, pueden estar mΓ‘s cerca de la consciencia de si o mΓ‘s lejos de ella.
La segunda cosa necesaria en un estudio serio de uno mismo es el estudio de las funciones mediante la observaciΓ³n de Γ©stas, aprendiendo a dividirlas en el sentido correcto, aprendiendo a reconocer cada una separadamente. Cada funciΓ³n tiene su propia profesiΓ³n, su propia especialidad. Deben ser estudiadas separadamente y entenderse claramente sus diferencias, recordando que estΓ‘n controladas por diferentes centros o mentes. Es muy ΓΊtil pensar sobre nuestras diferentes funciones o centros y comprender que son absolutamente independientes. No comprendemos que hay cuatro seres independientes en nosotros, cuatro mentes independientes. Siempre tratamos de reducir todo a una sola mente. El centro instintivo puede existir absolutamente aparte de tos otros centros; los centros motor y emocional pueden existir sin el intelectual. Podemos imaginar cuatro personas que viven en nosotros. La que llamamos instintiva es el hombre fΓsico. El hombre motor es tambiΓ©n un hombre fΓsico, pero con diferentes inclinaciones. Luego estΓ‘ el hombre sentimental o emocional, y el hombre teΓ³rico o intelectual. Si nos contemplamos desde este punto de vista, es mΓ‘s fΓ‘cil ver dΓ³nde cometemos el principal error acerca de nosotros mismos, porque nos consideramos como uno solo, como siempre el mismo.
No tenemos medios para ver los centros, pero podemos observar las funciones: cuanto mΓ‘s observamos, mΓ‘s material tenemos. Esta divisiΓ³n de las funciones es importantΓsima. El control de cualquiera de nuestra facultades sΓ³lo puede obtenerse con la ayuda del conocimiento. Cada funciΓ³n puede controlarse solamente si conocemos las peculiaridades y la velocidad de cada una. La observaciΓ³n de las funciones debe conectarse con el estudio de los estados de consciencia y los grados de consciencia. Debe entenderse claramente que la consciencia y las funciones son cosas absolutamente diferentes. Moverse, pensar, sentir, tener sensaciones, Γ©stas son funciones; pueden trabajar con absoluta independencia de si estamos conscientes o no; en otras palabras, pueden trabajar mecΓ‘nicamente. Estar consciente es algo absolutamente diferente. Pero si estamos mΓ‘s conscientes, inmediatamente aumenta la intensidad de nuestras funciones.
La segunda cosa necesaria en un estudio serio de uno mismo es el estudio de las funciones mediante la observaciΓ³n de Γ©stas, aprendiendo a dividirlas en el sentido correcto, aprendiendo a reconocer cada una separadamente. Cada funciΓ³n tiene su propia profesiΓ³n, su propia especialidad. Deben ser estudiadas separadamente y entenderse claramente sus diferencias, recordando que estΓ‘n controladas por diferentes centros o mentes. Es muy ΓΊtil pensar sobre nuestras diferentes funciones o centros y comprender que son absolutamente independientes.
No comprendemos que hay cuatro seres independientes en nosotros, cuatro mentesindependientes. Siempre tratamos de reducir todo a una sola mente. El centro instintivo puede existir absolutamente aparte de tos otros centros; los centros motor y emocional pueden existir sin el intelectual. Podemos imaginar cuatro personas que viven en nosotros. La que llamamos instintiva es el hombre fΓsico. El hombre motor es tambiΓ©n un hombre fΓsico, pero con diferentes inclinaciones. Luego estΓ‘ el hombre sentimental o emocional, y el hombre teΓ³rico o intelectual. Si nos contemplamos desde este punto de vista, es mΓ‘s fΓ‘cil ver dΓ³nde cometemos el principal error acerca de nosotros mismos, porque nos consideramos como uno solo, como siempre el mismo. No tenemos medios para ver los centros, pero podemos observar las funciones: cuanto mΓ‘s observamos, mΓ‘s material tenemos.