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P. La idea de que el mal es siempre inconsciente resulta mΓ‘s bien difΓcil de entender. ΒΏPuede explicarla un poco mΓ‘s?
R. Dije que, en primer lugar, trate de descubrir por sΓ mismo lo que llama mal, no mediante definiciΓ³n sino mediante ejemplos. Cuando tenga cierta cantidad de ejemplos, pregΓΊntese ΒΏpodrΓan ser conscientes? ΒΏLas cosas malas podrΓan hacerse conscientemente? DespuΓ©s verΓ‘ que sΓ³lo podrΓan hacerse inconscientemente. Otra respuesta es que todo lo que llama mal puede suceder mecΓ‘nicamente, y sucede siempre mecΓ‘nicamente, de modo que no tienenecesidad de la consciencia. Dije que debemos estudiar las ideas de este sistema principalmente en conexiΓ³n con la evoluciΓ³n del hombre, y expliquΓ© que, por evoluciΓ³n, debemos entender un proceso consciente y esfuerzos conscientes, continuos y conectados. No hay evoluciΓ³n mecΓ‘nica como a veces se entiende. La evoluciΓ³n, si es posible, sΓ³lo puede ser consciente, y el principio de la evoluciΓ³n es siempre la evoluciΓ³n de la consciencia, no puede ser la evoluciΓ³n de nada mΓ‘s. Si la consciencia empieza a evolucionar, otras cosas empiezan a crecer y evolucionar. Si la consciencia permanece en el mismo nivel, todo lo demΓ‘s permanece en el mismo nivel. Hay varias cosas que es importante entender desde el principio mismo en relaciΓ³n con la evoluciΓ³n. Primero, que de la grandΓsima cantidad de hombres nΒΊ 1, nΒΊ 2 y nΒΊ 3, sΓ³lo poquΓsimos pueden convertirse en nΒΊ 4, nΒΊ 5, nΒΊ 6 y nΒΊ 7, o siquiera empezar. Eso debe entenderse muy bien, porque si empezamos a pensar que todos pueden evolucionar, cesamos de entender las condiciones necesarias para el inicio de la evoluciΓ³n, como se las describΓ en el ejemplo de la prisiΓ³n.
P. ΒΏTodas las razas humanas tienen la misma posibilidad de desarrollo?
R. Esa es una pregunta interesante. Me planteΓ© esta pregunta cuando por primera vez afrontΓ© este trabajo, y me dijeron que habΓa sido discutida en escuelas importantΓsimas en un perΓodo importantΓsimo, y que luego de efectuar todos los experimentos posibles a este respecto, llegaron a la conclusiΓ³n de que, desde el punto de vista del desarrollo posible, no hay diferencia entre las razas blanca, amarilla, negra, cobriza y roja. En la actualidad, las razas blanca y amarilla predominan, mientras que en el pasado hacΓan lo propio una de las otras. Por ejemplo, la Esfinge nos recuerda a un negro, no a un europeo.
P. En conexiΓ³n con lo que dijo sobre el bien y el mal, ΒΏun seguidor de este sistema puede tomar parte en la guerra?
R. Esa es una cuestiΓ³n suya propia. No hay prohibiciones ni condiciones externas.
P. ΒΏPero podrΓa conciliar las dos cosas?
R. Nuevamente, es su asunto personal. Este sistema particular deja muy libre al hombre. Este quiere crear la consciencia y la voluntad. Ni la consciencia ni la voluntad pueden crearse siguiendo ciertas restricciones externas. Uno debe ser libre. Usted debe entender que las cosas externas son las que menos importan. Las cosas internas son importantes, la guerra interna.
P. Hay muchas cosas, que me parecen malas, que soy capaz de cometer.
R. Usted no puede tomarse como ejemplo porque sΓ³lo podrΓa tomar ejemplos del mal que ya cometiΓ³. De modo que es mejor tomar la idea en general. Encuentre todos los ejemplos posibles (no me refiero a accidentes o errores, porque muchos delitos son accidentales), pero tome todo lo que podemos definir como mal intencional, y verΓ‘ que Γ©ste no necesita consciencia; una sola acciΓ³n mecΓ‘nica, y todo sigue.
P. Eso crea la ilusiΓ³n de la alternativa.
R. Esa es la mΓ‘xima ilusiΓ³n: la ilusiΓ³n de' "hacer" y la ilusiΓ³n de la alternativa. Estas cosas pertenecen a un nivel superior. Empezando en el nΒΊ 4, uno ya comienza a tener alternativa pero los hombres nΒΊ 1, nΒΊ 2 y nΒΊ 3 tienen poquΓsima alternativa.
P. ΒΏUsted no dirΓa que el estudio de la magia negra fuera mal consciente?
R. ΒΏConoce a alguien que la estudiara, con excepciΓ³n de las personas que leen libros con lΓ‘minas terrorΓficas y que se engaΓ±an?
P. Si usted se impone deliberadamente el trabajo de engaΓ±ar a otra persona, ΒΏno se trata de mal deliberado?
R. Es muy probable que usted no pudiera hacer nada en su auxilio; existirΓa tal presiΓ³n de las circunstancias o algo asΓ, que usted no podrΓa obrar de otro modo. Todos estos son problemas difΓciles y lleva largo tiempo acostumbrarse, porque estamos acostumbrados a pensar en el sentido equivocado. Por ejemplo, cuando miramos los acontecimientos histΓ³ricos, tomamos como conscientes precisamente aquellas cosas que no pueden ser conscientes, y las cosas que pueden ser conscientes las tomamos como mecΓ‘nicas, como una especie de proceso.
Ahora bien, si volvemos a esta idea de que sΓ³lo poquΓsimos pueden desarrollar y hallar en sΓ mismos las posibilidades ocultas, surge naturalmente la pregunta: ΒΏQuΓ© determina la diferencia? ΒΏPor quΓ© algunas personas tienen una oportunidad y algunas personas no la tienen? Es absolutamente cierto que algunas personas no tienen oportunidad desde el principio mismo.